Simbólica la imagen de estas sillas vacías, en las pampas de Carrirriñe, cuando las comunidades esperaron, tal como estaba agendado, a Nils Huseby, representante de SN Power Latinoamérica, quien no se apareció, ni su representante Mario Marchese, ni tampoco dieron explicaciones.
El propio Huseby había sugerido al alcalde de Panguipulli, la reunión para la primera semana de diciembre. Posteriormente, intentando disculpar su ausencia, sostuvo que Marchese, gerente de la hidroeléctrica, “cuenta con todas las facultades para representar la empresa y entonces será el persona correcta para ver este asunto”.
Era el compromiso para este sábado 8 de diciembre. Reunirse en la pampa de Carririñe: la máxima autoridad comunal, el alcalde Kohler, la werkén de las comunidades ancestrales de Carrirriñe y Trafún, María Eugenia Calfuñanco y la autoridad de SN Power, Huseby o en su defecto Marchese.
Y dieron las once, las doce, la una y las tres…y no aparecieron. ¡SN Power no cumplió su compromiso! No se hizo presente en la reunión sugerida por ellos.
Y para que vean ustedes, el doble estándar y el cinismo de Marchese, gerente de la hidroeléctrica, declarando al Austral de hoy domingo, a propósito de una frustrada reunión informativa que intentaron hacer en Liquiñe, el reciente jueves. Además de mentir, poniendo cosas fuera de contexto, diciendo que allí hubo un diálogo de cuatro horas, declara que “este tipo de reuniones nos permiten dar a conocer nuestra forma de trabajar, y especialmente conocer y abordar las inquietudes de los habitantes de la zona”.
Claramente la intención de Marchese es mejorar la imagen de SN Power, haciéndola aparecer como una empresa que dialoga con las comunidades, precisamente, en momentos en que uno de nuestros dirigentes, el werkén Pedro Antimilla, se encuentra en Oslo, invitado a un Seminario para denunciar las prácticas de imposición por la fuerza y los daños irreparables que pretende hacer esta corporación. O sea, una típica maniobra mediática. ¡Alertas con el lobo noruego con piel de oveja dialogante!
¿Entonces, por qué SN Power dejó esperando a las autoridades, vecinos y comunidades? ¿Por qué no se aparecieron el sábado si están tan dispuestos al diálogo? ¿Por qué no aparecieron si la forma de trabajo que proclaman es conocer las inquietudes de los habitantes de la zona? ¿Un problema de cobardía? ¡Y también del cinismo de SN Power para confundir a la gente, intentando aparecer como los campeones del diálogo con las comunidades!
¡Había un compromiso entre la autoridad comunal de Panguipulli, las comunidades ancestrales de Carrririñe y la empresa noruega SN Power! La SN Power no concurre, ni da aviso, ni explicaciones.
Entonces, lo primero que tiene que entender SN Power es que en este territorio y en esta cultura, la palabra dada es importante. No es cuando ustedes quieran y cómo quieran los ejecutivos que nos vayamos a reunir. Es según lo acordemos, en conjunto, como la habíamos hecho para este sábado. Es otra muestra de por qué desconfiamos de sus palabras, como cuando dicen que las hidroeléctricas traerán progreso y bienestar.
A pesar de no estar presentes, la comunidad manifestó sus deseos y convicciones.
El Lonko Vicente Pitrillan "Tres veces los hemos echado y seguiremos así".
Iván Sheward, empresario agrícola "Respetamos incondicionalmente la forma de vida de las comunidades".
Jorge Weke, dirigente de comunidades ancestrales: " Hay que proteger y recuperar las aguas...”
Juez Juan Guzmán: “Estoy aquí por tres motivos, para promover el principio que el poder judicial sea independiente, para derogar la constitución de 1980 y para apoyar al pueblo mapuche en el reconocimiento de sus derechos”
La werkén María Eugenia Calfuñanco " No les pedimos que vinieran...pero queremos que se vayan…defenderé con mi vida, mi tierra, mis aguas y mis cerros...agendamos reunión con ellos para el 8 de Diciembre… ”
Alejandro Kohler, alcalde de Panguipulli: " Han sembrado la desconfianza entre nosotros…si no estuviera el pueblo mapuche activo…no habría oposición a los proyectos, sólo una razón del pueblo mapuche es suficiente para impedir estos proyectos, pero existen muchas... Aquí hay un pueblo que debe ser respetado. Este pueblo debe decidir qué hacer con su territorio y con su destino."
Queríamos decirles en su cara, que NO SON BIENVENIDOS, QUE NO NECESITAMOS SUS PROYECTOS, QUE NO COMPARTIMOS SU IDEA DE DESARROLLO LOCAL, QUE TENEMOS DERECHO DE DECIDIR SOBRE NUESTRO TERRITORIO. ¡QUE SE ESCUCHE EN OSLO!
Ya hemos dicho que esta corporación noruega SN Power, esta sociedad anónima transnacional, que tiene el descaro de ocultarse con el nombre mapuche Trayenko, sólo le motivan las ganancias monetarias de lejanos inversionistas, indiferentes a las inquietudes de nuestras comunidades ancestrales, no les interesa la cultura local, el deterioro al medio ambiente o nuestras formas de vida. Es hora que denunciemos en todos lados, que las centrales hidroeléctricas “de pasada” de la noruega SN Power, sólo son “ganancias a la pasada” que dejaran pobreza permanente a nuestra gentes y territorios.
¡Y que las autoridades de gobierno se manifiesten! ¿Van cumplir como Estado con su compromiso de suscribir los acuerdos del Convenio 169 de la OIT, para ayudar a promover y proteger los derechos de los pueblos indígenas? ¿Hasta cuándo las comunidades mapuche van a seguir con la experiencia de atropellos, engaños, despojos y exclusión? Porque las comunidades sienten una nueva afrenta del Estado chileno (Secretaría de Servicios Eléctricos, SEC) por su responsabilidad de haber otorgado la concesión a una empresa extranjera, extraña al territorio, sin haber consultado a las comunidades. Ninguna autoridad se ha aparecido por la zona.
¿Y que decir de los compromisos del Estado? El consentimiento de los ciudadanos y comunidades que las corporaciones transnacionales dan por sentado para sus proyectos, no puede comprarse prometiendo beneficios que el Estado tiene el deber de asegurar. El Estado no puede renunciar a su compromiso con la población más vulnerada, la red de asistencia social no puede protagonizarla el gran capital ni la economía colonizadora neoliberal, como en los casos de Celco en Mehuin y BHP Billiton en el salar de Atacama, dos corporaciones inmensas que, aprovechando la ausencia del Estado, dominan un territorio y reparten mínimos beneficios sociales para promocionar su imagen. El gobierno no puede deslegitimar su propia política de protección a la biodiversidad y el medio ambiente, ni ausentarse de la economía.
Llamamos a estar alerta a los riesgos que la empresa noruega SN Power está imponiendo a la convivencia local, con amenazas y divisiones entre familias, donde las personas empiezan a tener un precio, según convenga a sus intereses.
¡DEFENDAMOS NUESTRO TERRITORIO, NUESTRAS FORMAS DE VIDA,
NUESTRO DESTINO!
No hay comentarios:
Publicar un comentario